Desarrollo de proyectos inmobiliarios factibles
Plantear un proyecto de construcción complejo enfrenta muchas decisiones directamente relacionadas con su ruta crítica, las cuales impactan en tiempo de ejecución, costo y calidad, no es novedad que ante la volatilidad del mercado, desarrollar proyectos inmobiliarios requiere de un diseño y planeación que aborde su factibilidad constructiva.
Una problemática recurrente en el sector ha sido el constante rediseño y retrabajos durante la construcción; lo cual, inevitablemente, origina una reducción de productividad que implica incrementos de costo y tiempo de ejecución.
Determinar el correcto método de entrega del proyecto se convierte en una decisión crucial, y que ha encontrado una solución en la nueva fórmula de integración de servicios diseño-construcción.
Experiencia de colaboración.
A diferencia del método tradicional de entrega en el que primero se diseña, posteriormente se concursa la obra y al final se construye, los servicios integrados de diseño-construcción reúne todas las disciplinas en una sola entidad trabajando de manera colaborativa desde el diseño y planeación del proyecto.
Los arquitectos entienden las implicaciones constructivas de sus propuestas y los constructores alimentan las decisiones de diseño desde su conocimiento en campo, sin perder la noción estética.
El propietario gestiona un solo contrato, donde el diseño y la construcción trabajan de manera colaborativa bajo un mismo objetivo: entregar proyectos exitosos, que cumplan o inclusive, superen las expectativas del propietario.
Cuando los equipos encuentran desafíos en un proyecto, y sabemos que siempre hay desafíos, señalar y buscar culpables únicamente complican más la ejecución. En cambio, cuando cada uno aporta su experiencia para trabajar en conjunto, las soluciones aparecen.
Factibilidad creativa.
Al trabajar de manera colaborativa arquitectos, ingenieros, constructores y consultores desde las fases tempranas de un proyecto, el diseño se complementa con el conocimiento de operaciones para optimizar la logística del diseño hacia una construcción más eficaz.
Esta colaboración permite diseñar bajo fases lógicas, con planteamientos de diseño construibles, acompañados de presupuesto, logística y secuencias constructivas.
La posibilidad de que se pasen por alto elementos constructivos durante el diseño se reduce considerablemente, entregando al propietario Documentos Constructivos que atienden las necesidades de la obra, esto permite reducir las omisiones de diseño inesperadas durante la construcción.
Inicios anticipados.
Para el propietario, trabajar bajo un solo contrato con una firma integrada de diseño-construcción, permite acelerar la ejecución de su proyecto, optimizando tiempo y costos de entrega.
Debido a que el diseño se realiza con base a su factibilidad constructiva, los paquetes de diseño se pueden emitir por fases.
Sin terminar el diseño, se pueden iniciar los concursos de subcontratistas y la procura, permitiendo que la gente en campo reciba información a priori para iniciar con trabajos de movimiento de tierras, con un control presupuestal administrando un Precio Máximo Garantizado.
Diseñar hacia un monto objetivo.
Lograr que la inteligencia de construcción impacte en la inteligencia de diseño para la planificación de un proyecto eficaz es gracias a la metodología Target Value Design.
Aplicar esta metodología permite asegurar tiempo y presupuesto con los mayores estándares de calidad, sin perder la intención de diseño.
Así, en lugar de presupuestar un diseño se diseña conforme a un objetivo de costo, lo que permite mantener su control presupuestal durante la ejecución.
De esta manera, en conjunto con el cliente, se toman decisiones de diseño de manera oportuna priorizando los componentes de diseño significativos haciendo mejor uso del dinero.
Único punto de responsabilidad.
Trabajar bajo la metodología integrada de Diseño-Construcción, además de que permite una planificación eficiente, brinda al propietario el beneficio de gestionar un solo contrato.
Una entidad es responsable de todo el proyecto, incluido el diseño, su costo, la ejecución y el cumplimiento del programa de obra.
Cuando el mismo grupo que diseña el proyecto también lo construye, se presta mayor atención a los costos y el programa de obra durante la fase de diseño.
El diseño-construcción se centra en los resultados, no en las excusas.
Una única entidad tiene la responsabilidad y el riesgo contractual para cada aspecto de un proyecto, desde su diseño hasta la preconstrucción y estimados de costo, la ingeniería, la subcontratación, la construcción y la post construcción.
Esta entidad, Diseñador-Constructor, gestiona todos los contratos con empresas, como subcontratistas, proveedores de equipos y proveedores de materiales. De esta manera, la administración por parte del propietario se facilita.
Seleccionar la mejor firma Diseño-Construcción
Diseño-Construcción es una moneda de dos caras. Su mayor fortaleza es la responsabilidad transferida a una sola entidad, y su mayor debilidad es el riesgo asociado.
Elegir desarrollar un proyecto bajo este modelo convierte en un tema crucial la selección correcta de una firma transparente y experimentada en la que pueda confiar.
Se requiere de un solucionador de problemas – un socio – que ofrezca soluciones de construcción innovadoras y proporcione el mejor valor a través de cada decisión.
Por: Samantha García