Turismo y hoteleria han adoptado medidas excepcionales
La pandemia por Covid-19 generó una situación social, económica y financiera sin precedente y se abrio una puerta para nuevas oportunidades en diferentes sectores tales como el turismo y la hoteleria.
A raíz de la veloz propagación del coronavirus, los viajes de negocios y de placer se paralizaron, causando una crisis económica hotelera debido al cierre temporal de muchos hoteles o de las operaciones apenas a una fracción de su capacidad. De acuerdo con datos de la Organización Mundial del Turismo (OMT) en mayo del 2020 se redujo el número de turistas internacionales en un 98% comparado con el año anterior, lo que demuestra la vulnerabilidad del sector y el impacto que han tenido diversos hoteles en rentabilidad y supervivencia.
La incertidumbre y la cautela influyeron negativamente en el interés de los inversionistas hoteleros en 2020. De acuerdo con el reciente informe Hotel Investment Outlook de JLL, durante el año pasado a nivel mundial, la liquidez hotelera se redujo en más del 60% con respecto al 2019; el 50% de todas las transacciones se cerraron en los primeros tres meses.
Los grupos de capital privado y los inversionistas aprovecharon los activos que se pusieron a la venta e impulsaron la liquidez en 2020 al representar el 54% del volumen total. Aproximadamente el 21% de las inversiones hoteleras globales se realizaron en mercados turísticos. Esto generó que proyectos hoteleros se rediseñaran a las necesidades que el mercado global exigía.
La resiliencia del sector ha dado forma a nuevas experiencias y demanda de los consumidores. Con la llegada de las diversas vacunas a nivel global y a más de un año del inicio de la pandemia, las personas están comenzando a viajar de nuevo, lo que lleva al sector hotelería y turismo a un nuevo objetivo: crear un entorno que priorice la seguridad y refuerce los niveles de confianza de los huéspedes, y por consecuente, de sus propios empleados.
La reactivación está empezando a verse y pese a que ha sido muy paulatino, se ha percatado la necesidad de las familias de salir a lugares amplios, al aire libre y que al mismo tiempo brinden seguridad en cada parte del hotel, habitaciones, alimentos y amenidades, por lo que nuestra responsabilidad como Gerentes de Proyecto es apoyar y orientar a nuestros clientes a que cumplan con los nuevos requerimientos que sus huéspedes exigen, a través de la reconfiguración de espacios.
Los empresarios del sector hotelero están aumentando su inversión en tecnología, con el fin de que les permita incrementar la automatización y con ello crear una estancia con el menor contacto posible. Además, la inversión tecnológica va acompañada de una cultura de digitalización que mejora el control del propio negocio para que sean más eficientes y eficaces de cara a la nueva normalidad
Por: Samantha García