Medalla Bellas Artes de Arquitectura para Roberto Meli
El trabajo del Ingeniero Roberto Meli Piralla, pionero en el estudio de la ingeniería sísmica, será reconocido en septiembre, fecha que nos obliga a tener presente la importancia de la ingeniería estructural y el diseño sísmico de los edificios.
Septiembre, mes patrio, es una fecha que trae a la memoria los sismos y nuestras vulnerabilidades. A raíz de los pasados eventos, y sobre todo en el área de arquitectura, nos recuerda que es necesario trabajar de manera interdisciplinaria para prevenir, revisar la condición de los edificios actuales, y proponer medidas encaminadas a diseñar de manera segura.
Pero también es un mes que invita a celebrar aspectos positivos, como la solidaridad de los mexicanos en momentos difíciles; o la existencia de muchos profesionistas capaces y comprometidos con el bienestar social, cuyo trabajo realmente hace una diferencia en la vida de las personas. Es el caso de Roberto Meli Piralla, pionero en el estudio de la ingeniería sísmica y dedicado profesional de la restauración de edificios históricos y artísticos, quien recibirá la Medalla Bellas Artes de Arquitectura el próximo 5 de septiembre.
Originario de Roma, Italia, Roberto Meli llegó a México en 1957 para hacer la carrera de ingeniero civil en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Fue discípulo de Luis Esteva Maraboto, Francisco Robles y Roger Díaz de Cossío. Desde 1964 ha impartido cátedra de Ingeniería Estructural en su alma máter y ha sido coordinador del posgrado de Ingeniería Sísmica. Es investigador emérito del Instituto de Ingeniería de la UNAM y recientemente obtuvo el reconocimiento a la Trayectoria en Ingeniería por la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios, distinción que antes obtuvieron tres de sus maestros.
Su actividad académica es sobresaliente, al impartir cursos y conferencias en varios centros educativos nacionales e internacionales, y como docente en la Universidad de Texas y en el Politécnico de Milán. Además, forma parte del Comité Académico del Posgrado en Urbanismo y dirige el Subcomité Académico de Ingeniería Civil del Programa de Posgrado en Ingeniería de la UNAM.
Precisamente fue a raíz del temblor del 19 de septiembre de 1985, que comenzó a dedicar largo tiempo al estudio de temas ligados al comportamiento y diagnóstico de sistemas constructivos, y así definió criterios de amplia aceptación, tanto en el ámbito nacional como en el internacional, para la toma de decisiones en las áreas de diseño, construcción y rehabilitación de estructuras.
Su investigación ha contribuido a reducir la vulnerabilidad de las construcciones y las pérdidas por daños en estas, así como por las correspondientes reparaciones. Muestra de este trabajo son sus numerosas publicaciones, algunos de ellas consideradas como referencia obligada para la enseñanza de la arquitectura y la restauración: Diseño sísmico de edificios, Diseño estructural de los edificios históricos y Los conventos mexicanos del siglo XVI. Construcción, ingeniería estructural y conservación por mencionar algunas.
En años pasados recibió el Premio Nacional de Ingeniería Civil por parte del Colegio de Ingenieros Civiles de México; y el actual reconocimiento le será entregado durante una ceremonia que se llevará a cabo a las 19:00 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, Ciudad de México, donde estará acompañado por Xavier Cortés Rocha, Efraín Ovando Shelley, Arturo Balandrano y Dolores Martínez Orralde, directora de Arquitectura del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).